Se utiliza como disolvente (disuelve otras sustancias) en muchos productos de consumo.
La Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas (ECHA) identifica que el metoxietanol (también llamado 2-metoxietanol o metil cellosolve) “puede dañar la fertilidad y puede dañar al feto, es un líquido inflamable y vaporoso, perjudicial en caso de ingestión, nocivo en contacto con la piel, y nocivo en caso de inhalación causando daños a órganos”. Canadá y la UE han prohibido el uso de la sustancia en productos cosméticos.